¿Conoces cuáles son las instalaciones en las que comúnmente se encuentra una tubería de cobre? A lo largo de este post vamos a darte las claves fundamentales sobre esta clase de instalaciones, de los motivos que llevan a usar el cobre y del tiempo que aguantan en buen estado. Además, haremos un repaso de las averías más comunes y de sus posibles soluciones. Así pues, sigue leyendo este post. Y recuerda que puedes profesionalizarte a través del curso de fontanería que ofrecemos en Escuela Gremio. ¡Vamos allá!
Índice de contenidos
¿En qué tipos de instalaciones se utiliza la tubería de cobre?
Los conductos de cobre se encuentran, actualmente, muy extendidos. Para comprender la razón por la que es posible encontrarlo en tantos tipos de instalaciones diferentes, es preciso conocer las características del material. Así, puede decirse que el cobre se caracteriza por:
- Instalación fácil y flexible. Se trata de un material maleable que puede ser cambiado de forma con facilidad. Así es relativamente sencillo organizar una potencial instalación. Curvas, giros y líneas rectas, todo lo pueden hacer estas cañerías.
- Resistencia al calor y a la presión. Es fundamental para participar de algunas clases particulares de instalación, como las de agua caliente o gas.
- Buen comportamiento en exteriores. No necesariamente han de estar cubiertas o enterradas. Pueden hallarse en instalaciones a la intemperie.
Pues bien, todo lo dicho es lo que permite al cobre estar presente en muchas clases de instalaciones diferentes. Si bien es cierto que, en esencia, se puede hallar en tres clases básicas:
- Fontanería. Esto incluye cañerías de entrada y de salida. Pueden estar presente en instalaciones sanitarias o cocinas.
- Gas. De manera que conservan en su interior el gas sin fugas y sin quebrar por la presión.
- Calefacción. Debido a su facilidad para aguantar las temperaturas más altas sin excesiva erosión.
¿Por qué usar tuberías de cobre?
A la hora de hablar de las razones que pueden empujar a utilizar la tuberías de cobre, lo cierto es que es preciso referir a varios aspectos. Tres de los más importantes ya los hemos descrito al referir a las ventajas propias de esta clase de cañerías. Sin embargo, lo cierto es que puede plantearse la cuestión desde otro punto de vista más clarificador.
De esta manera, los dos motivos principales que han de empujar a alguien a utilizar cobre en sus instalaciones son los siguientes:
- Resistencia. Tanto en temperatura como en presión, así como a los daños propios de la intemperie. En esto se fundamenta, precisamente, la alta versatilidad que ofrece este material. Es posible encontrarlo en instalaciones de toda clase y tipo. Al fin y al cabo, es un material que tampoco sufre los daños del frío.
- Durabilidad. De nada sirve la referida resistencia si esta se acaba en un corto periodo de tiempo. Por suerte, con el cobre esto no es así en ningún caso. Probablemente tú mismo hayas observado antiguas cañerías de este material que siguen funcionando perfectamente. La razón se encuentra en la alta durabilidad que presentan frente al desgaste.
¿Cuánto tiempo dura una tubería de cobre?
Desde hace prácticamente 100 años, la inmensa mayoría de cañerías e instalaciones de fontanería y gas del mundo se realizan con tuberías de cobre. Esto ya te pone de manifiesto que lo que venimos refiriendo es absolutamente cierto. Muchos instaladores han podido comprobar empíricamente las propiedades de este material.
Precisamente en esta línea, resulta conveniente destacar que, después de diferentes estudios realizados a la hora de calcular la duración media de estas cañerías, se ha determinado que tienen una vida de servicio media de entre 75 y 100 años.
Posibles averías en instalaciones de cobre y sus soluciones
Que hayamos afirmado que una tubería de cobre tiene una alta durabilidad y resistencia, no significa que sean irrompibles. De hecho, en ocasiones es posible encontrar cañerías de cobre que han sufrido diversos grados de avería.
Precisamente por esto, aquí te planteamos algunos de los daños que más comúnmente sufren, así como sus posibles soluciones.
Corrosión como consecuencia de la cal
La cal, al pasar a través de una tubería fabricada en cobre, puede ir acumulándose. Esta acumulación en sucesivas capas puede degenerar en una posible corrosión. La corrosión, en esencia, consiste en la progresiva pérdida de grosor en las paredes de la cañería. La cal, por motivos químicos, reacciona con el cobre, dando lugar a óxido de cobre (Cu2O), lo cual ocasiona la erosión.
Para evitar y solucionar este problema, es preciso hacer uso de dispositivos como los anillos antical. Estos se instalan a diversas alturas de la tubería, eliminando y disolviendo la cal. Esto evita, finalmente, que reaccione con el cobre.
Fisuras por fatiga
Si la instalación no es sólida, el flujo interior de la cañería puede hacer que se mueva o vibre. Un movimiento continuado a lo largo del tiempo provoca la fatiga del material y, por tanto, su rotura.
La mejor manera de solucionar este problema es previniéndolo con una instalación sólida. Una vez acaecido, ha de reforzarse nuevamente la tubería en sus partes más fatigadas.
Drenaje taponado
Más que una avería de la cañería en sí, se trata de un problema derivado de su uso. En aquellos supuestos en los que se da una acumulación de restos sólidos dentro de la tubería, puede taponarse. La consecuencia principal es el detenimiento del flujo. Esto puede dar lugar a problemas más graves, como una rotura final por acumulación de presión. Por eso, es tan importante solucionar con rapidez los tapones.
Lo ideal es hacer uso de productos químicos destinados a tal fin. En el caso en el que el tapón sea excesivamente resistente, habría que contactar con servicios de fontanería capaces de deshacerlo.
Formarse en fontanería en Escuela Gremio
La oferta formativa de Escuela el Gremio destaca por su variedad en los campos de especialización, siendo uno de ellos los oficios y las profesiones. Y precisamente, a través del curso de fontanería y calefacción podrás adquirir los conocimientos teóricos de un profesional de este sector.
A través del programa formativo de este curso estudiarás en profundidad los diferentes materiales empleados en instalaciones de fontanería y calefacción, así como sus averías más comunes y las reparaciones pertinentes. Así pues, si quieres adquirir conocimientos en este ámbito, no dudes en formarte con nosotros.